¿Son los perfiles técnicos poco creativos?

¿Son los perfiles técnicos poco creativos?


La respuesta a la pregunta es, para nosotros, que no. Nuestra experiencia nos lo demuestra.

La innovación en las compañías no debe darse sólo a nivel de producto. Una empresa innovadora, tal y cómo explicamos en un pos anterior, debe tener un enfoque estratégico innovador. Aún así, cabe tener en cuenta que una empresa innovadora también es aquella que tiene incorporado en el ADN de toda la organización la creatividad y la innovación. Por lo tanto es aquella que es capaz de innovar en cualquier ámbito del negocio: producto, procesos, temas organizativos,  finanzas,  calidad, producción, distribución,…

Lo que ocurre es que a veces, personas con perfiles más “técnicos”  no están convencidas que también pueden ser creativos puesto que no han tenido muchas oportunidades de demostrarlo. Porque nunca se les ha pedido que lo sean dentro de su área, más centrada en racionalizar que en poner en duda lo que se hace, O porque al no tener herramientas ni experiencia no se sienten comodos en este papel de reinventarse. O, la mayoría de las veces,  porque están convencidos que al manejar temas racionales una metodología de pensamiento creativo no les puede ayudar.

Pero, cuando les das la oportunidad de aportar ideas y les facilitas algunas herramientas que les ayuden, ellos son los primeros sorprendidos en constatar que pueden ser tanto o más creativos que otros perfiles considerados tradicionalmente como los más creativos dentro de la organización. Y que se pueden encontrar ideas rompedoras para los temas más racionales.

En los 2 ultimos años, hemos tenido la oportunidad de trabajar con muchos departamentos financieros, logísticos, de compras o de producción. Y no hemos generado ni menos ideas, ni menos ideas rompedoras, ni una proporción inferior de ideas “aplicables”. Hemos visto más de un grupo “técnico” evolucionando de manera muy rápida y desarrollando un pensamiento creativo más potente que equipos de marketing o agencias de publicidad con quien hemos trabajado.

Al fin y al cabo, esto nos demuestra una vez más que la creatividad es una habilidad que se puede desarrollar con la práctica y con ayuda de cierto proceso y técnicas. Cualquier persona puede ser creativa independientemente de su función en la empresa, lo primero para ello es creérselo y lo segundo es practicar. Influye más el punto de partida y la cultura que le rodea que el perfil o el sector.

Por lo tanto desarrollar el pensamiento creativo tiene mucho sentido y dará resultados concretos tanto en una empresa con perfiles más técnicos, como puede ser una empresa industrial,  o en los departamentos más técnicos de cualquier empresa.